Masaje miofascial: Terapia y bienestar para todo el cuerpo
El masaje miofascial es una técnica de masoterapia que se enfoca en el tejido conectivo que envuelve y sostiene los músculos, los órganos, los nervios y los vasos sanguíneos del cuerpo.
Este tejido se llama fascia y tiene una gran importancia para la salud y el bienestar, ya que facilita el movimiento, la circulación, la elasticidad y la coordinación de las diferentes partes del cuerpo.
Quedate con nosotros, acá vas a encontrar todo lo que necesitás saber y conocer sobre esta técnica que con certeza querrás experimentar.
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Qué es la fascia y por qué se tensa
La fascia es simplemente el tejido conectivo, compuesto principalmente por fibras de colágeno. El mismo se encuentra en todas partes del cuerpo: tendones, ligamentos, epidermis y vainas, además de músculos, huesos, órganos y vísceras. Representa el 70 % del peso corporal.
Este elemento, de gran importancia en el cuerpo, puede volverse más denso y arrugado. Esto puede ocurrir por diversas causas, como el estrés, las malas posturas, las lesiones, las cicatrices, el sedentarismo o el envejecimiento.
Cuando la fascia se tensa, se inflama, se adhiere o se lesiona, puede provocar dolor, rigidez, limitación de movimiento, alteración postural y disfunción de los órganos afectados.
Qué es el masaje miofascial
El masaje miofascial es una terapia que busca liberar estas restricciones fasciales, mediante la aplicación de presiones sostenidas y suaves, así como de estiramientos y movimientos específicos sobre las zonas afectadas.
El objetivo es restaurar la funcionalidad y la movilidad de la fascia, aliviar el dolor y mejorar la calidad de vida de las personas que sufren problemas musculoesqueléticos, neurológicos, circulatorios o viscerales.
Este tipo de terapia se puede realizar de forma manual, con las manos de la masajista, o de forma autónoma, con la ayuda de herramientas como pelotas de tenis o rodillos de espuma.
La forma manual suele ser más precisa y personalizada, mientras que el auto-masaje puede ser más práctico y accesible.
Cómo se realiza un masaje en la fascia
Para realizar el masaje miofascial, se puede usar un rodillo de espuma, una pelota de tenis o las manos. Estos son los pasos que se deben seguir:
Identificar el área a tratar. Se puede palpar la zona afectada para buscar puntos de dolor o sensibilidad, que suelen indicar una alteración de la fascia. Conversa con tu masajista para un diagnóstico más preciso y que adecue la terapia acorde a tus necesidades.
Aplicar presión sobre el punto de dolor. En este caso se tiene como alternativa el uso del rodillo de espuma o la pelota de tenis para ejercer una presión firme y constante sobre el área a tratar. Se debe mantener la presión durante unos segundos o hasta que se sienta una disminución del dolor. Si se usan las manos, se puede realizar un movimiento de deslizamiento o de amasamiento sobre la fascia, siguiendo la dirección de las fibras musculares.
Movilizar la zona tratada. Después de aplicar la presión, se debe mover la articulación o el músculo asociado al punto de dolor, para favorecer la liberación de la fascia y la circulación sanguínea. Luego proseguir con movimientos de flexión, extensión, rotación o balanceo, según la parte del cuerpo que se esté trabajando.
Repetir el proceso en otras áreas. Se puede repetir el mismo procedimiento en otros puntos de dolor o en otras zonas del cuerpo que se quieran tratar. Se recomienda empezar por el tren inferior y luego subir hacia la parte superior, completando movimientos firmes y pausados.
Hidratarse y estirar. Al finalizar la sesión de masajes, se debe beber agua para ayudar a eliminar las toxinas que se hayan liberado durante la terapia. También se debe realizar algunos estiramientos suaves para relajar los músculos y prevenir el dolor postural.
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5 beneficios del masaje miofascial
El masaje miofascial tiene múltiples beneficios para la salud física y mental, siempre que se realice de forma adecuada y segura. Aquí te compartimos algunos de ellos:
- 1 Mantiene el sistema de fascias en buen estado
Al aplicar esta técnica se liberan tensiones y adherencias que se forman en la fascia que permite la mejora y la función de toda la estructura del cuerpo.
- 2 Permite más movilidad articular
El masaje miofascial también aumenta la flexibilidad y la movilidad de las articulaciones, al restaurar la elasticidad y la propiocepción de la fascia. Esto mejora la postura, el equilibrio, la coordinación y el rendimiento deportivo.
- 3 Elimina toxinas acumuladas en las capas fasciales
Al aplicar los masajes en zonas específicas del cuerpo, favorece la circulación sanguínea y linfática, lo que facilita el aporte de oxígeno y nutrientes a los tejidos y la eliminación de toxinas y desechos que se acumulan en las capas fasciales.
- 4.Combate y previene la retención de líquidos
El masaje en la fascia también ayuda a combatir la retención de líquidos, al estimular el drenaje de los fluidos que se estancan en el tejido subcutáneo. Esto reduce la hinchazón, la inflamación y el edema.
- 5 Mejora la circulación sanguínea
Uno de los efectos de este novedoso método es la relajación de los vasos sanguíneos y el aumento del flujo de sangre en todo el cuerpo. Esto mejora la oxigenación y la nutrición de los tejidos, acelera la recuperación y previene la formación de coágulos.
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